Eternos campos minados de la conciencia,
del individuo común y cotidiano,
donde es imposible cruzar y estar a salvo,
sin que nos exploten las bombas del pasado...
Ese pasado que nos oprime por completo,
nos elimina la conciencia desde el vamos,
donde es mas cómodo contener un ente dominado,
que una persona que active sus luces emocionales...
Materia gris transmutada en blanco pálido,
por deficiencias crónicas de los elementos de transición,
con resultados claros, directos y concretos,
de decisiones vanas en contextos que no son...
Confinamientos prolongados,
en estancias subterráneas de silencio,
con seres abisales que vigilan los movimientos,
y poco a poco nos alejan mas de nuestros cuerpos...
Nuevos modelos homologados,
para nuevas generaciones de genes de micro mutantes,
seres humanos de otras épocas, devenidos en algo que aun no sabemos bien que es...
Seres insensibles de lentas actitudes,
de obediencias supremas casi sin reacciones,
con envases vacíos como engendros de la nada,
como un grito ahogado en la garganta del mal...
Mundos viejos con estereotipos modernos,
como un pase y revuelva dentro de nosotros mismos,
apices pequeñas detrás de las mamparas,
que separan la vida de la cruel realidad...
Mundos modernos sin esencia ni valores,
márgenes etereos para no colapsar,
ejemplos carentes de todo significado,
crónica anunciada de una nueva normalidad...
Eduardo Garrido
Buenos Aires, Argentina
D.R.A.
