Gitana de los siete velos,
leíste mi mano aquella tarde
cuando paseaba por el parque,
en busca del tibio sol de abril...
De pronto te acercaste y me dijiste guapo !!!,
déjame que te lea tu futuro aquí,
muestrame tu mano que ella lo dice todo,
déjame que te diga que doncella te hará feliz...
Tus ojos eclipsaron mi mirada,
y mis ojos ya no pudieron reaccionar,
gitana de ojos verdes me hechizaste,
tomaste mi mano y a ti me rendí...
Conjuros secretos de la raza calé,
romaní puro de los gitanos viejos,
polleras, velos y pañuelos al viento,
en un dulce atardecer de Plaza Francia...
Pactos de sangre de muñeca a muñeca,
costumbres cíngaras de la antigüedad,
tradiciones ancestrales con hechizos y conjuros,
que sellarán para siempre nuestra felicidad...
Eduardo Garrido
Buenos Aires, Argentina
D.R.A.
