Mis miedos habitan debajo de mi cama,
allí están los monstruos que no me dejan soñar,
los que atan mis prejuicios y me quitan el aliento,
o los que hacen que me ponga en un rincón a llorar...
El miedo a la oscuridad y a no poder enfrentar las sombras,
al miedo por el miedo o a mi propia incapacidad,
a entregarme entero y plenamente en tus brazos,
a enfrentarme contra el mundo por tener miedo de amar...
Ese cielo nublado que se pelea conmigo,
que avasalla mis silencios y ya no me deja pensar,
se bate a duelo constante noche a noche y cada día,
amanezco derrumbado ya sin ganas de luchar...
En el espejo de mi rostro se refleja un alma compungida,
como una mascara que llora con secas lagrimas de sal,
colgada en una pared vacía de un cuarto deshabitado,
con la mirada perdida quizás en otro lugar...
Con ese rostro desencajado,
gastado por el llanto del silencio,
enfrentaré uno a uno a mis miedos,
aunque me dobleguen una vez mas...
Dejaré la luz del cuarto encendida,
para que no se apoderen de mi las sombras,
para que mis miedos se duerman,
y pueda al fin descansar en paz...
Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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