Mostrando las entradas con la etiqueta PESADILLA.... Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta PESADILLA.... Mostrar todas las entradas

28 julio 2022

PESADILLA... (Relato)



Salí a caminar por la escollera del sur y la espesa niebla me envolvió hasta ocultarme, el frío y la humedad calaron mis viejos huesos y de pronto entendí que en el mundo no era nada.
El horizonte es una masa más allá del agua, donde el agua y la tierra se juntan para coexistir, donde la vida suele ponerse particularmente dura y sobrevivir casi siempre se convierte en una pesadilla.
En la busqueda continua de la ruta del destino pasamos por alto que lo primordial de todo es vivir, pensando que ya pronto se vendrá otro nuevo dia y nos olvidamos de vivir el que nos llevó hasta ahí.
Tuve la tentación de terminar de una vez con todo, pero la baranda de la escollera sirvió para apoyar mis pensamientos y para comprender que no era la solución para ningún problema, que la vida se peleaba de otra forma.
Salí a caminar por la escollera del sur y la espesa niebla me acompaño en cada instante, para no sentirme solo en esa travesía me acompañaba como siempre mi ego cansado caminando al lado mío.
Ya estaba por amanecer y me dolían las piernas de tanto caminar, había pasado caminando toda la noche y la escollera se había terminado hacia rato, entonces me senté un momento al costado del camino y encendí un cigarrillo.
Un rumor me llegaba desde el agua y cada vez era más fuerte,
no sabia muy bien si eran gemidos o solo un llanto, tal vez era un animal que estaba herido, atrapado en una trampa o asustado,
pero de todas formas, empezaba a inquietarme  que se escuchara tan cerca.
Me acerque al borde del agua con las primeras luces del día y mi sorpresa fue mayúscula al observar que esos ruidos provenían de una caja en la que estaba durmiendo plácidamente un dulce bebe, estaba arropado y parecía tan inofensivo que me causo gracia el menudo susto que me había dado.
Entonces comencé a preguntarme quién lo habría abandonado, quien podría ser tan insensible, tan miserable para hacer una cosa así,
mire por todos lados y no había nadie, en todo caso quién lo había abandonado allí ya se había marchado hacia mucho tiempo, y me corrió un escalofrío por todo el cuerpo.
Lo tome en mis brazos y comencé el viaje de regreso a casa, tratando de apurar el paso para llegar pronto, allí tendría la oportunidad para revisarlo y comprobar si estaba todo bien.
Sería esta la señal que me enviaba el destino, iba pensando por el camino mientras estaba llegando a casa.
Dejar a este niño allí solo toda la noche, sin dudas quien hubiera sido quería que ese niño se muriera, que hubiera pasado si mi destino no me hubiera llevado hasta ahí o si no lo hubiera escuchado, lo miraba tan indefenso al pobrecito dentro de esa caja y las lagrimas afloraron en mis ojos, parecía incapaz de cometer ninguna maldad, tan chiquitito, tan frágil.
Pero estaría en lo cierto con mis pensamientos ?, o quizás no y fuera algún tipo de anticristo, algún monstruo, un hombre lobo, un vampiro o algo así, deseche esas ideas alocadas de mi cabeza trasnochada y me propuse ser un padre para ese niño que la vida había puesto en mi camino, que como el de la cruz también se había salvado de las aguas, las aguas, las aguas... !!!, en ese momento me desperte sofocado, me dolía la cabeza, estaba todo transpirado, había tenido una brutal pesadilla que me dejo descolocado, ese niño, esas aguas, esos monstruos, esos malos pensamientos, habría sido una señal de ese destino que me quería decir algo, o sería solo otra historia mas, otro capítulo de esta hermosa novela llamada vida...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
Reservados Autor





EN LOS BOLSILLOS DEL VIENTO...

En el torbellino que hay dentro de mi donde las sombras juegan a ser yo, guarde mi alma en los bolsillos del viento con un secr...