Usted...,
me ha demostrado,
que la vida es muy hermosa,
que a pesar de los altibajos,
y las vicisitudes,
a las que el destino nos lleva,
con gente como usted,
todo cambia,
y el mundo es otra cosa...
Usted...,
me ha demostrado,
que no es indiferente,
que la malicia,
que acompaña al hombre,
y la destrucción,
que esto conlleva,
hace que el desprotegido,
sufra condiciones inhumanas...
Usted...,
lucho contra el hambre,
la marginalidad, el desapego,
los sistemas obsoletos,
el desprecio, el desamor,
la falta de oportunides,
el hacinamiento, la desesperación,
la falta de contención,
la falta de empatía...
Usted...,
me ha enseñado,
que la vida es otra cosa,
que a pesar de todo,
y a pesar de todos,
hay que seguir,
que jamas hay que decir que no,
y jamas hay que bajar los brazos...
Usted...,
me acarició el alma,
y eso jamás se olvida,
la vida puede doler,
puede ampollarnos las manos,
hacernos tropezar mil veces mas,
pero esta en nosotros la actitud,
para buscar una y otra vez,
la ansiada oportunidad...
Eduardo Garrido
Buenos Aires, Argentina
D.R.A.
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