No es mágica la belleza de la luna,
ella es real y tangible,
su luz dibuja las sombras,
y te vuelve tan real como impredecible...
Es efímero el vuelo de mis alas,
que no se animan a dejar el nido, por temor a perderse en esas sombras,
que envuelven el abismo de tu amor...
Mis manos no pueden encontrarte,
tu cuerpo forma parte de esa niebla,
y sienten de pronto el vacío estancado,
alrededor de esa inmensa soledad...
La soledad que lleva inmersa la tristeza de la luna,
que aun siendo una diva majestuosa,
y a pesar de que todo lo ilumina, siempre sera perseguida por las sombras...
Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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