En las horas en que baja el sol,
y se adueña del momento el crepúsculo,
el silencio aturde la casa vacía,
y la calma prepara otra noche mas...
Los días pasan implacables,
el tiempo no detiene su marcha,
los relojes ya no cuentan las horas,
y tu imagen se empieza a desdibujar...
El hechizo va perdiendo su efecto,
y como las calabazas todo vuelve a la normalidad,
el amor deja sus huellas en el alma,
indelebles marcas grabadas a fuego en nuestro corazón...
La emoción al recordar tu rostro,
tu voz esta en el silencio de mis oídos,
mis ojos que aun te ven a mi lado,
y tus caricias que son aun una cálida brisa de verano...
Siempre quedarás en los restos de este amor,
juntos estaremos unidos eternamente,
la muerte logró separarnos en este plano,
pero la eternidad sera nuestro refugio para siempre...
El ocaso de la clara luz del día,
da paso al mágico crepúsculo de nuestro amor,
que a su vez nos abre la belleza de la noche,
para desplegar las alas de nuestro vuelo de pasión...
El hechizo soltó todas nuestras ganas,
el amor hizo todo lo demás,
la historia dirá que solo fuimos amantes clandestinos,
pero la vida..., que fuimos la leyenda de una ciudad...
Eduardo Garrido
Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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