Temores infundados por adoctrinamientos férreos,
errores conceptuales desde la niñez,
canciones de cuna que no han sonado nunca,
abandonos concientes con sabor a hiel...
Infancias miserables en orfanatos viejos,
marcas de censura en una pared gris,
temores enclaustrados en sótanos malolientes,
horrores increíbles que supimos conseguir ...
Bailes preparados para una exhibición de feria,
que muestran decadencia y lo que no queremos ver,
confuciones intrínsecas propias de la miseria,
conclusiones tipicas propias de la idiotez...
Esos excesos nunca llegan a buen puerto,
la codicia presume lo que siempre estara bien,
la avaricia cruza el puente y tomada de la mano,
de los viles corruptos que arrasan todo lo que ven...
Los siglos avanzan y las sociedades retroceden,
pero los errores se vuelven a cometer,
las mentiras nunca dejaran de ser mentiras,
y la justicia justa sigue sin aparecer...
Dictadores chatos con una conciencia infame,
viviendo en la opulencia de la miseria popular,
con banquetes grandes y gastos a contra mano,
acallando voces, cercenando libertad...
Mutaciones nuevas de preceptos viejos,
dogmas desteñidos que vienen y van,
luces que se apagan, alarmas que se encienden,
modelos agotados que vuelven a fracasar...
Eduardo Garrido
Buenos Aires, Argentina
D.R.A.
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