EN LOS BRAZOS DE LA SOLEDAD...

Mis dedos caminan por tu morena piel,
en mis noches sedientas de fantasías y deseos,
porque tu amor en cuentagotas me subleva,
cuándo ya no puedo contener la excitación...

Las horas del reloj con sus tic-tac cuentan a gritos,
que no nos quedan más márgenes de tiempo,
porque las luces del amanecer se llevarán cautivas,
todas nuestras emociones contenidas...

Camino por el parque vacío de mi imaginación,
y los pétalos terciopelo de tu rosa me siguen en silencio,
el corazón de pronto se me parte en mil pedazos,
porque te extraño aquí y ahora pero no estás...

Soy un hombre que encontró en los brazos de la soledad,
la calma para afrontar otra tormenta,
y así mis luces encendidas se fueron apagando,
para poder ver todo lo escondido en la oscuridad...

No hay nada que pueda evadirme de esta realidad,
tendré que acostumbrarme a vivir sin mañana,
tratando de vivir solamente el presente,
como pueda o como sea para no terminar muriéndome sin ti...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
Reservados Autor  

MI MUNDO AZUL...

Yo tenia un mundo azul,
donde todo era color de rosa,
donde el arcoíris brillaba tras el sol,
y sin espinas nacía la blanca rosa...

Pero ese mundo azul se me rompió,
porque era demasiada la alegría,
la gente era feliz y se sentía volar, 

junto a los pájaros que surcaban su sonrisa...

Mi mundo azul se derrumbo,
y de a poquito desapareció del universo,
no servía para los detractores del mal,
pues ser feliz para ellos no valía...

Por eso mi mundo azul se fue,
la flor hermosa ya no quiso florecer,
el color rosa se volvió negro y
oscureció mi cielo,
y mi mundo azul se dejo morir...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2021 Derechos
Reservados Autor




 

MARGARITAS...

Las margaritas de los senderos que recuerdo de mi infancia,
hoy las sigo viendo a pesar del paso de los años,
junto a las flores de la vida que perfumaron mis ansias,
y los amores secretos que quedaron en mi alma...

Como prueba del destino que acompaño mis andanzas,
me quedan los sinsabores de las noches malogradas,
de los amores prohibidos y los excesos mundanos,
pero también en mi haber quedan los sueños que guardo...

Las vivencias tan sentidas de los momentos irrepetibles,
cuando la lluvia nos empapo en nuestra dulce madrugada,
y la magica explosión de nuestros cuerpos adolescentes,
donde fuimos solamente un hombre y una mujer...

Las margaritas de esos senderos se transformaron en estrellas,
que iluminaron mis sueños hasta hacerlos realidad,
y hoy mirando hacia atrás con la mirada perdida,
me doy cuenta que en la vida hemos sido tal para cual...

Los senderos de la vida me llevaron por el tiempo,
y hoy miro a lo lejos toda nuestra felicidad,
tanta alegría vivida y tantos sueños concretados,
y tanta agua bajo el puente que ha visto la vida pasar...

Y en la hermosura y la simpleza de esas suaves margaritas,
veo reflejada la esencia de toda mi vida hasta acá,
los sueños y ese amor de los años compartidos,
los senderos y las flores que para siempre en mi alma vivirán...




Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
Reservados Autor 

BOSQUEJOS DE COLOR...

Busco imágenes que despierten mi inconsciente,
que liberen endorfinas atascadas en mi piel,
llenas de sensaciones de placeres insurgentes,
con los colores estridentes de la libertad...

Como si fuera un enorme equilibrista,
haciendo malabares para subsistir,
entre las sombras del ayer y los destellos del mañana,
sin caerme en el intento de transitar el degrade del hoy...

Los claroscuros marcan mis diferencias,
y el entorno se amiga conmigo para prestarme sus aromas,
las ideas brotan de una cabeza que se parte para hacerlas realidad,
cuando el bosquejo está en marcha y el arte aflora en cada rincón...

Así es mi vida plasmando colores de tela en tela,
un sinfín de bastidores como rompecabezas mágicos,
con mis pinceles, mis óleos, mis acrílicos y mis estecas,
con técnicas nuevas, tips, y lienzos ávidos de llenarse de color...

Así es mi vida acompañada por mis sueños,
mi taller y mi inseparable amigo el mate,
mis trabajos, mis proyectos, mis colores,
esos colores que le pongo a la vida para hacer el equilibrio...

Ese equilibrio necesario para hacer lo que me gusta,
y para devolverle al mundo todo mi arte hecho color,
para agradecerle a la vida que tengo la fortuna,
de regalarle al mundo un pedacito de mi magia hecha color...


Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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SILENCIOS...

En esas noches con madrugadas empapadas de soledad,
donde sopla un frío viento que escapa de un amor que ya fue,
ahí en medio de la desolación de mis noches,
me encuentro uno a uno con todos tus recuerdos...

Desnudos momentos que me han dejado tiritando,
con la mirada triste perdida en el ocaso gris,
donde me sobran los silencios vacios,
y me faltan besos para entibiar cada una de tus ausencias ...

Mientras afuera la oscura y fría madrugada,
va humedeciendo la verde hierba del camino,
pongo mi corazón entre la soledad y el desencanto,
para escribir desde adentro la agonía de mi dolor...

Los versos tristes de esta noche llena de vacío,
expresan todo el cansancio y el agobio contenido, 
en días de llantos ahogados a la fuerza,
para no sufrir tanto los desencuentros del amor...

La soledad cala los huesos y nos amordaza el alma,
el silencio nos va acostumbrando a no soñar,
y así la vida de a poco se nos va pasando,
mientras impávidos miramos como se nos va la felicidad...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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TE BUSCO EN MIS NOCHES...

Te busco en mis noches vacías de amor,
pero ya no encuentro la tibieza de tu espalda,
mis sueños te encuentran dentro de mi corazón,
pero mis ojos ya no ven tu mirada...

El silencio perpetuo de la habitación,
me dice que ya te has marchado,
el cielo está oscuro y la tormenta es feroz,
porque azota mi playa un huracán de nostalgias...

El dolor doblega mi sordido dolor,
y me hundo de lleno en mi propio delirio,
sumergido en el silencio de la desesperación,
de morirme de a poco vacío de mi mismo...

Siento aún tu perfume en mi húmeda almohada,
mis dedos aún sienten la suavidad de tu piel,
parece que siento tu respiración en mi pecho,
pero todo es un sueño porque no estás aquí...

Los sonidos del viento me hablan inquietos,
en un raro idioma tan vacío de ti,
y en la casa solo se mueven las cortinas,
como fantasmas y espectros que huyen de mi...

Te busco en mis noches vacías de amor,
y encuentro lejanas vivencias estáticas,
imágenes de tiempos en donde el amor,
habitaba nuestros jóvenes cuerpos...

La tormenta pasó pero me quedan las heridas,
el viento esta calmo y ya no me habla de ti,
comienzo otro día y continúa la vida,
escondiendo el dolor para tratar de ser feliz...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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AL COMPÁS DEL VIENTO...

Caminando en silencio como matando el tiempo,
cargando lo positivo que me dejo el amor,
apurando el paso para salir de la oscura niebla,
mientras el frío envuelve otra noche de mi corazón...

La lluvia copiosa anega los verdes valles,
las amapolas se mecen al compás del viento,
y esta experiencia de vida se vuelve mas intensa,
cuando empiezo a perder la empatía con el sol...

El cielo me dice que no todo se acabó,
y las luces evitan que se crucen las miradas
los dioses contentos rugen de placer,
porque aún me amas cruelmente a la distancia...

Ese amor que se ha quedado enquistado,
dentro de mi piel enmudeciéndo mi boca,
dejándome los gritos atravesados en el alma,
sin poder decir que seguirás dentro mío aunque te vayas...

Las amapolas siguen en su vaivén con el viento,
como en un trance acompasado en un baile ritual,
la niebla se disipa en medio de la noche,
y la luna cómplice me vuelve a acompañar...

La última estrella me indica el camino,
que me llevara a encontrarme nuevamente contigo,
me llevo una amapola en la mochila del destino,
para recordar en mi viaje esas noches que vivimos...

Esa dulce amapola ya nunca se morirá,
estará en un lugar privilegiado dentro de mi pecho,
como en el baile sensual con la brisa del viento,
la amapola de tu amor tendrá un eterno romance con mi corazón... 



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
Reservados Autor

EL ÚLTIMO DADO...

Frases sueltas sin ningún sentido,
que no dicen nada pero vaya si cuentan,
como las mañanas de aquellos inviernos,
al lado del fuego de una vieja hoguera...

Escapando del frío que deja el vacío del amor,
crepitando los silencios junto con esos leños,
calentando con el aliento las manos y poniendo el pecho,
a la intensa helada que moldeo sin reparos viejas tristezas...

Me tomé un impasse para escribir sin miedos,
para no sentir que me estoy forzando a nada,
para no direccionar mis palabras en ningún sentido,
para no ser juez y parte de este turbulento rio...

Quiero ser yo quien salga a contar lo que me pasa,
en este momento que solo me lleva a reflexionar,
sobre las huellas que deja la vida marcadas en la piel,
y los caminos oscuros que ya no dejan ver la luz...

Mientras el sol gastado apenas entibia el alma,
quedo dando vueltas como una gallina clueca alrededor del nido,
esperando el veredicto de la doña bataraza,
para ver a qué huevo le toca el empolle del día...

No me quiero perder en la filosofía barata,
en discusiones de comadres por la novela de las tres,
la vida es un racimo de dulces uvas que merece ser degustado,
saboreando uno a uno todos los misterios de Baco rey...

La vida es esto, es todo, pero a veces también es nada,
y la nada misma otras veces es mucho más,
dependiendo de con quien se tire el último dado,
terminarás siendo punto, banca o vaya a saber qué...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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Reservados Autor

ESCRIBIENDO SUEÑOS...

Escribiendo sueños con tinta indeleble,
para que no se borren de la faz del alma,
para que queden perpetuos adheridos a tu sangre,
como un tatuaje vivo dentro de tu corazón...

Escribiendo sueños de mañanas mejores,
delineando siluetas enlazadas por amor,
fabricando quimeras que nos ayuden un poco,
a acomodarle las nubes en las estanterías al sol...

Escribiendo sueños para soñarlos despiertos,
para ser una estrella de la hinchada local,
dibujando sonrisas en los chiquillos de la esquina,
y en las pelotas de trapo de esos domingos a puro gol...

Escribiendo sueños para seguir viviendo,
y vivir soñando para seguir escribiendo,
sueños que se viven en noches de verano,
y sueños de hadas que se hacen realidad escribiendo mis sueños...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
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ESTOY AQUÍ...

No podremos saber nunca el porqué de las cosas,
lamentablemente la vida pasa y las cosas sencillamente suceden,
a estas alturas ya no se si fue tu culpa o si fue mía,
o tal vez fue de los dos, o de todos,  o de nadie...

Tampoco se si a estas alturas importa el porqué,
porque la vida se nos pasó y estamos grandes,
y tengo miedo de que en algún momento ya no se pueda volver,
después va a ser tarde y no habrá vuelta atrás...

Tantos años hemos pasado dispersos,
casi que en nuestra vida fue una constante,
una eterna cadena de situaciones de desencuentros,
a los que nos terminamos acostumbrando...

Hay momentos en los que ni siquiera dan ganas de hablar,
pero otros en los que quisiera contarte todo lo que me pasa,
aprendimos a no vernos a no necesitarnos,
aprendimos a hacer de cuenta que el otro no está...

Pero tengo miedo que alguna vez vos o yo nos digamos,
que estupidez tan grande nos hizo hacer esto,
porque nunca tuvimos el coraje de decir esto o aquello,
y preferimos transcurrir la vida de esta manera...

No se si aprendimos mal o nos enseñaron peor,
pero quizás el día que nos demos cuenta,
definitivamente sea tarde porque uno o los dos,
ya no vamos a estar para poder decir hermano estoy aquí...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
Reservados Autor

SE QUEBRÓ EL AMOR...

Te viniste a acostar entrada la madrugada,
olías a tabaco y a perfume de Coco Chanel,
lucías tan cansada después de un día tan largo,
y los ojos hinchados de no parar de llorar...

Las manos te temblaban y no se si era de frío,
hacia varios días que no nos hablábamos ya,
el silencio es la peor tortura de todas las torturas,
y aflora en los momentos donde se quiebra el amor...

Te acostaste en silencio sin decir ni una palabra,
y el resto de la noche solo fue un monólogo del insomnio,
cuando amaneció el que sería el peor de nuestros días,
eramos casi dos extraños en una habitación de hotel...

Las vueltas de la vida y la vida de las vueltas,
un juego de palabras acomodadas al azar,
en los sueños contenidos en frascos de perfume,
como fragancias efímeras que nos perfuman y se van...

Te viniste a acostar y fue nuestra última noche,
el silencio y las lágrimas marcaron nuestro sonido del reloj,
y al amanecer cuándo despuntaba el alba,
ni siquiera un adiós se musito en nuestros labios...

La vida nos golpeó como tantas otras veces,
y ese amanecer marcó lo que iba a suceder,
un adiós irremediable forzando el último desencuentro,
un desencuentro esperado para no decir ni adiós...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
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PARA SUFRIR...

Le pedí a mi corazón lastimado que no sufra más por ti,
que no vale la pena sufrir por quien no lo merece,
pero él sabiamente me contestó que no sabía hacer otra cosa,
que había nacido para sufrir por un amor...

Como le digo a mi corazón que te olvide,
si aun te llevo profundamente dentro mio,
como hago para sacarte de mi pecho herido,
si aún me desangra el vacío de tu ausencia...

Como hago para que este viejo y terco corazón,
le cierre la puerta a la mentira y a tus engaños,
como apago la luz de tu diabólica sonrisa,
si el sol de tu mirada todavía alumbra mi alma...

Es tan fácil decirle al tiempo que se lleve las falsas promesas,
pero el destino se ha empeñado en dejar este dolor aquí,
como juntar este cristal que hace mucho se hizo añicos,
sin lastimarnos las manos con los vidrios de este amor...

Le pedí a mi corazón tantas pero tantas cosas,
y el corazón confundido me respondió a tantas otras,
porque la vida no siempre camina por nuestro camino,
y el corazón muchas veces  toma el camino equivocado...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
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DOGLAND...

Una tarde de sol de un día cualquiera,
la vieja estación de Dogland quedo vacía,
el último tren se acababa de ir hacia un rato,
y en el se había ido parte de mi vida...

Ese otoño fue el último que pasamos juntos,
las hojas de los árboles tapizaban las vías del tren,
el viento arremolinaba las hojas con mis pensamientos,
y mis ojos se cerraban para no llorar el desconsuelo...

Me habia quedado en la estación hasta que llego la noche,
porque quería conservar hasta tu último aliento,
me resistía a olvidar esa última sonrisa,
con la que me habías dicho adiós algún día volveré...

En esos momentos los recuerdos habían pasado dentro de mi,
como una película casi en camara lenta,
y las improntas de esos hermosos momentos,
quedaron tatuados dentro de mi corazón...

Los años pasaron y la vida nos llevo por caminos distintos,
pero nunca olvide los años que pase contigo,
y aunque el tiempo ha pasado y ha sido implacable,
nunca he olvidado lo que ha sido nuestro amor...

Hoy el tren ya no pasa por la vieja estación de Dogland,
pero algunas tardes de sol paseo por sus andenes,
y los recuerdos de esos años de tierna juventud,
endulzan el sabor amargo del amor que no fue...

Hoy el tren ya no pasa por la vieja estación de Dogland,
lo que vivimos juntos quedara dentro mio para siempre,
y esas hojas, esos aromas y ese viento,
me seguirán trayendo la fragancia y la ternura de los recuerdos...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
© 2022 Derechos
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DESNUDEZ DEL ALMA...

Un reflejo azabache nos atrae como la noche,
porque se asemeja al color de las lágrimas de la vida,
con los sueños que nos acompañan aun estando despiertos,
para conseguir esa felicidad que nos resulta esquiva,
tratando de vivir una suerte de simbiosis,
aunque sea solamente un maquillaje de mentiras...

Hasta el intimo momento en el que se escucha el silencio,
en donde el solo hecho de dejar caer un alfiler,
nos provoca una estampida de intensas sensaciones,
que nos envuelve en una oscura paranoia,
como un grito ahogado que en el medio de la noche,
nos confunde con su eco adormecido...

Un sonido metálico nos cabalga sobre los sentidos,
y la vida que es tan volátil nos maneja a su voluntad,
ya no habrá más sol, ni cielo, ni tampoco miedos,
porque esa mañana será otra mañana mas,
y mi cuerpo erguido todavía estara ahí,
esperando que tu cuerpo abrace mis silencios...

La fragilidad queda expuesta en tu mirada,
las lágrimas caen por tus mejillas dejando surcos de sal,
y la savia de este amor se derrama sobre camas vacías,
donde solo quedan los despojos de nuestros cuerpos,
que nos alejan de las nubes del hastío cotidiano,
para taparnos el frío de la desnudez del alma...



Eduardo Garrido
Buenos Aires
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