Soy el poeta que escondido entre las sombras,
guardo en mi corazón y en los pliegues de mi memoria,
los versos que alguna vez ilusionado te he escrito,
pero nunca me atreví a declararte al fin mi amor...
Quizás las diferencias que abundaban entre ambos,
fueron las que motivaron lo imposible de este sueño,
tu eras una rica y joven muchacha de la alta sociedad,
y yo un pobre poeta que nunca te alcanzaría...
Yo era un bohemio que creaba en mi buhardilla,
versos de amor que reflejaban a la vida,
pintando cuadros con los paisajes de las novelas,
con los pensamientos de mis utópicas ideas...
Un idealista rodeado de plumas y pinceles,
con visiones sublimes de amores de primavera,
con vidas simples rodeadas de complejidades,
y complejas situaciones para mis simples vanidades...
Hombres de barro que se deshacen en la lluvia,
tierras desganadas y vacías de los cultivos de la vida,
semillas que no llegarán siquiera a ver la tierra,
como versos que se pierden en los surcos de la conciencia...
Sigo en las sombras escondido de mis miedos,
porque aún le temo al rechazo de tus labios,
me quedo en la soledad de mi vieja buhardilla,
llorando en el silencio y soñando que eres mía...
Cada día sigo esculpiendo la figura de tu rostro,
cada noche pinto el lienzo que alguna vez será tu cuadro,
escribiendo las letras que alguna vez serán tus versos,
tallando el corazón que latirá junto a tus pasos...
Eduardo Garrido
Buenos Aires
🇦🇷 Argentina 🇦🇷
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